Habiéndose hecho amigos un hombre y un demonio
se sentaron a comer juntos
Como el día era en extremo frío
el hombre se llevaba ambas manos a la boca y soplaba en ellas
¿Por qué haces eso
amigo mío
-preguntó el demonio.
- Tengo frío en las manos
respondió el hombre-. Lo hago para calentarlas
Al poco rato les trajeron un poco de comida caliente, y como el hombre
cada vez que se aproximaba la cuchara a la boca
soplaba, el demonio le preguntó
-
Y qué significa eso que haces ahora
iOh
- replicó el hombre
. Como está muy caliente
soplo para que se enfríe
-
De veras¡
exclamó el demonio-. Desde ahora renuncio a tu amistad
pues no quiero estar con uno que tanto sopla para calentar como para enfriar
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